el que no busca no encuentra...

lunes, 10 de agosto de 2009

Sorpresas e ironías.

Cuando algo que no te esperas, de repente aparece en tu vida dándole un giro radical a ésta, puedes llamarlo sorpresa... Cuando alguien que creías que no podía existir ya, te devuelve a la vida con cada uno de sus besos...a eso puedes llamarlo ilusión... Cuando esa persona pasa de ser un desconocido a ocupar el 100% de tus pensamientos... cuando esa persona consigue que vuelvas a creer en algo que pensabas que ya no existía... a eso puedes llamarlo amor...

Es tan irónico plantearte una vida con alguien que hace unos meses ni siquiera sabías de su existencia... es irónico pensar que necesitas a esa persona para seguir adelante, por que sólo ella saber darte esa seguridad que antes no sabías ni por donde empezar a buscar...

Quieres creer que no es para tanto, pero te das cuenta de lo equivocado/a que estás cuando el simple hecho de verle sonreir dibuja una sonrisa mayor en tu rostro, cuando cada uno de sus gestos te embelesa... cuando acabas adorando todo lo que hace y cómo lo hace... cuando su voz te parece la mejor combinación de notas posible...cuando llegas a casa y ya extrañas su olor...

Es entonces cuando llega el momento de quitarse el caparazón y darse una oportunidad... y es entonces cuando la vida te dice: " ¡¡¡ sorpresa !!! " , por que esa persona se ha convertido en el motivo por el que te levantas cada día con más motivación que ayer.
Y empiezas a engancharte, y cada susurro suyo es terciopelo para tus oídos, cada caricia que te dedica es para ti un regalo del cielo... y te sientes absurda cuando una simple canción te recuerda momentos que habeis pasado juntos... cuando sueñas...cuando sueñas que nunca más tendreis que separaros...

Después de todo esto sólo queda dar las gracias. Darle las gracias por ser la razón por la que sonries, decirle a esa persona que siempre estarás ahí, que siempre podrá contar contigo, por que después de todo lo que ha conseguido hacerte sentir no podrás devolvérselo ni en un millón de años.

Y si quieres comprobar de alguna manera si en realidad es para tanto, lo sabrás el día que empieces a desear, que si es cierto que después de la muerte hay otra vida, darías lo que fuera en ésta por vivir la próxima con él/ella otra vez.

Y si sientes todo esto: ¡ sorpresa ! estás enamorado/a.
¡ Ironía! nunca te lo habrías imaginado...